Sodoma

Te he buscado tanto, entre el mar, el cielo, la tierra y el infierno... Eres mi pecado, la causa de mi perdición... No estoy paranoico, pero siento que soñabas conmigo y entre tus sueños me atrajiste a Ti. ¡Vamos! Toma mi cuerpo esta tarde gris, comparte mi pecado y vuela a Sodoma conmigo. El cielo se caerá en pedazos, nuestro deseo poseerá a los ángeles y a los demonios y al vernos arder en pasión no les quedará mas opción que pecar junto con nosotros también. Toma mi mano, besa mis labios, pon tu cuerpo sobre mi, deja estar dentro de Ti... ¡Ven! Somos ambos hijos de Sodoma y Onán, no temas pecar junto a mi. Mi piel ansía beber tu dulce líquido andrógino, acariciar tu piel masculina, probar tu oculto lado femenino... Sé mi cómplice en esta travesía por los caminos de la sodomía, volemos juntos a elevar incienso en el altar de Sodoma, sacrifiquemos nuestros cuerpos al dios Onán y terminemos bañados en su láctea gloria.

Misantropía

Te odio humanidad por el simple hecho de que nací humano... Yo he comenzado a borrar todas esas estúpidas debilidades humanas llamadas sentimientos, sólo así seré perfecto. Te odio humanidad por ser el más claro ejemplo de la hipocrecía, por dejar de ser humana y convertirte en una jauría de hienas y mandriles y destruir a los que son iguales que tú, por intentar sodomizar a quien no se somete a tus leyes, por excluir a los que somos diferentes, por creer en un dios que has creado a tu conveniencia... No soy humano, soy un simple respiro cósmico en este planeta humanizado por bestias. Es nefasto vivir entre gente iguales entre sí y que no acepten la diferencia ajena. Humanidad me das asco, es repugnante ser humano. Yo soy una bestia, un dios tal vez, pues sólo los dioses y las bestias se apartan de la humanidad. Para ti: Humanidad, soy un antinatural, un desviado, un demente, un misógino, pedófilo, pervertido, puto, apóstata, hereje, verborreico, asesino... Mas no te das cuenta de que simplemente soy un espejo de tus actos... Yo soy una sombra que opaca tu perfección, Tú eres el crisol mediante el cual seré perfecto un día y entonces seré tu dios.

Delirius

Veo tu cuerpo, desnudo, sin piel y deseoso de hacer el sexo conmigo... Tu boca, mi piel, tus besos y un subidón al cielo con polvo de ángeles... El demonio se aparea con tu dios y es entonces cuando comienza el viaje sin fin... Toma más ácido y colorea este paraíso negro, coloca tu semen en mi lengua y explota... Arde el cielo y llueve luz saobre mi cuerpo, los ángeles me poseen y los demonios entran por mis poros... Guarda silencio, no he muerto, sólo es un orgasmo, toma mi piel y hazte un abrigo para que la luz no entre en tus ojos de lascivia... Come mi carne y bebe mi sangre, masturbate en memoria mia... Soy tu delirio, el temor de tu amor, el color negro que pinta tu sangre púrpura... Ven aquí tómame y hazme volar al más allá, lejos de este mundo de madriles.